Mapas Mentales
por Xóchtil Niezhadanova
Muchos grandes genios como Madame Curie han elaborado caminos delineados sobre una hoja en blanco, en los que trazan los pasos a seguir dentro de su proceso de vida para llegar a su meta, como el descubrimiento del radio en el caso de esta ilustre científica. En una hoja cualquiera de papel, de manera desordenada y algo caótica, Marie Curie comenzó a delinear uno por uno los pasos que la conducirían a lo largo de un período de tiempo fijado por ella, al descubrimiento del radio. Y tal como lo especificó en su burdo diseño, así sucedió en la realidad, y en 1898 el radio fue descubierto por Curie y su marido Pierre en una variedad de uraninita del norte de Bohemia. Mientras estudiaban el mineral, los Curie retiraron el uranio de él y encontraron que el material restante aún era radioactivo. Entonces produjeron una mezcla radioactiva hecha principalmente de bario que daba un color de llama rojo brillante y líneas espectrales que no se habían documentado anteriormente. En 1910 el radio fue finalmente aislado por Curie y Andre Debierne en su metal puro.
Los mapas mentales se emplean en toda clase de áreas. Consisten en tomar notas, y mediante la creatividad y la lluvia de ideas realizar resúmenes escritos como una herramienta nemotécnica que sirva como medio para explicar ideas complejas. Los datos que se encuentran contenidos en un mapa mental ya más elaborado, se pueden utilizar para mejorar otras aplicaciones, por ejemplo, los sistemas expertos o los motores de búsqueda.
Los mapas mentales ayudan a: la expansión de la memoria; el desglose de una gran cantidad de información contenida en unas cuantas palabras, dibujos, letras, colores, etc. Contienen resumida una enorme cantidad de información, a través de elementos visuales que explican de manera sucinta una serie de ideas que plantean objetivos determinados. Sirven para facilitar el estudio de temas complejos. Y a través de su uso se pueden facilitar los procesos de aprendizaje, pensamiento, ordenación, y creación, en cualquier ámbito del conocimiento. Todos podemos realizar un mapa mental que permita poner en orden nuestras ideas y colocar de manera consecutiva los pasos necesarios para alcanzar cualquier propósito. Es como diagramar nuestro cerebro para saber por dónde avanzar a través de sencillos dibujos y símbolos que nosotros podamos entender. Los mapas mentales nos permiten dejar de procrastinar, ordenar nuestras ideas e imaginar los pasos previos a la consecución de nuestros planes ya sea en una tarea de índole académico o en la planeación de nuestra vida personal.
Para una época en la que todo se torna visual, los diagramas de los mapas mentales son ideales para ordenar nuestro pensamiento. Incluso existen aplicaciones o programas de computación que de formas atractivas y coloridas nos permiten hacer uso del concepto de los mapas mentales para planear nuestras metas a corto, mediano y largo paso. Toda una vida puede estar inscrita en un mapa mental. Al paso del tiempo regresamos a nuestros diagramas del mapa mental que elaboramos hace tiempo, y la sorpresa puede ser grande al constatar que hemos seguido cada uno de los pasos explicados en el papel, y que hemos terminado por cumplir las metas más añoradas, que en su momento creímos imposibles de llevar a cabo. En un pensamiento propio de genios que nos hace establecer de antemano cualquier idea creativa que tengamos en mente.
Los mapas mentales son para los genios y los creadores. Pero todos tenemos un poco de eso. Solo es necesario que ordenemos nuestras ideas, y con sumo detalle vayamos desglosando uno a uno los pasos que nos llevaran a la consecución de nuestros proyectos. Con un poco de práctica podemos hacer del mapa mental una herramienta fundamental en la planificación y realización de cualquier tipo de proyecto. El realizar un mapa mental nos obliga también a pensar en los obstáculos que enfrentaremos a la hora de llevar a cabo una tarea por muy simple o trascendental que esta sea. Pensar en los inconvenientes ejercita nuestra mente, nos permite crear caminos alternos o soluciones a los posibles impedimentos. En todo momento la creatividad es una herramienta indispensable que nos permite diagramar nuestro futuro, y asegurar el éxito de cualquier proyecto que estemos dispuestos a emprender.
Un mapa mental es tan complejo o sencillo como el objetivo que estamos intentando diagramar. De cualquier forma nos ayudará a cumplir nuestro cometido, y una vez realizado podremos consultarlo cada vez que sintamos atorarnos en nuestro propósito, modificarlo o mejorarlo para que incluya todos los procedimientos necesarios para cumplir el objetivo previsto. Un mapa mental puede diagramar toda una vida, por más absurdo que nos parezca. Nuestro pensamiento analítico y racional puede diseñar el camino que habremos de seguir a grandes rasgos, para cumplir todas las metas que deseemos realizar en el tiempo que dura una vida. No hay mente creativa que en algún momento de su trayectoria haya recurrido al mapa mental como un mecanismo de poner en orden sus ideas y predecir los eventos de una vida de trabajo en pos de una meta.
Todos deberíamos recurrir a esta poderosa herramienta para poner en orden nuestros pensamientos, y potenciar nuestra capacidad de realización creativa. Con un mapa mental existen mayores posibilidades de que cualquier empresa que emprendamos tenga éxito. No perdemos nada con ponernos a construir como una detallada estructura, paso por paso, los peldaños que nos conduzcan al éxito y la realización personal. Si crees en el poder infinito de esta herramienta te sorprenderás de sus alcances. Hace tiempo cuando yo era joven, con la guía de un psicólogo hice el mapa mental de mi vida. Hay mil esquemas y yo utilicé uno de ellos guiada por mi intuición. Diez años después había cumplido casi todas las metas que había incluido en mi mapa mental. Al verlo sentí deseos de llorar, llevada por un sentimiento de felicidad y realización única. Tenemos un poderoso instrumento que es la mente. Esta es capaz de cualquier proeza y el mapa mental es una herramienta que la lleva de la mano para realizar los sueños más anhelados.

