La Última Vez

FUENTE: Nietjuh en Pixabay
Por AITANA LAGO
Mayo 15 2018
La última vez que me enamoré fue hace mucho tiempo y fue la primera vez que me pasó al instante.
Normalmente necesito conocer a la persona para encontrar afinidades, gustos, incluso admiraciones, pero esa vez, hace casi diez años, fue excepcional, escuché su voz y algo se había movido dentro de mí, lo vi un par de segundos y supe que ese hombre me fascinaba.
Me enamoré así, casi de inmediato, no sé si él se enamoró de mí o solamente le gusté, pero eso no importa ya, porque fue hace mucho, todo pasó y nos dejamos olvidar. Después de él me ha sido muy complicado enamorarme de nuevo, al menos enamorarme así como me pasó con él, de sentirme feliz, de despertar y que él fuera lo primero en lo que pensaba, de sonreír por cualquier cosa y creer que él era mi destino.
Al final, no pasó de ese simple enamoramiento, que fue intenso, en el sentido de las emociones. Después de él he querido a otros, incluso los he amado, pero no me he enamorado como con él, tal vez por eso lo guardo en la memoria, porque fue la última vez o, en una de esas, la única vez que me sentí así.
…enamorarse es sentirse atraído por un ideal…
Tendríamos que clasificar y distinguir entre el enamoramiento y el amar a una persona, pero no de manera científica, sino cada uno de nosotros, hacer un análisis de nuestras relaciones y de lo realmente sentimos, así podríamos entender que el enamoramiento es pasajero y el amor es más difícil de acabar. Sí, me enamoré de él y no me arrepiento porque al menos una vez he sentido esa emoción con tanta intensidad, pero si les soy sincera yo prefiero querer a las personas porque para mí enamorarse es sentirse atraído por un ideal, por una imagen que hemos creado del otro, de alguien que no existe en realidad.
Querer, para mí, es un proceso más lento, en el que hay que conocerse, entenderse y reconocer la naturaleza de la persona. Aceptar lo que es y a pesar de los defectos, sentirse atraído y conectado. A muchos he querido, a pocos he amado y sólo de uno me he enamorado, ¿y ustedes?
En Los Calzones de Guadalupe
tenemos buena estrella,
porque podemos soñar y mostrar el alma sin pena

