
El arte de estar en el presente
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Por GABRIELA OROZCO
El Mindfulness es una técnica de meditación cuyo origen se atribuye al budismo. Consiste en la capacidad humana de estar en el presente y tener conciencia de ello. Se traduce al español como Atención Plena. Sin Mindfulness o Atención Plena no podríamos estar conscientes de nuestra propia experiencia y vivir en el mundo. Desafortunadamente, lo que normalmente ocurre es que nuestra mente está atendiendo permanentemente a pensamientos sobre el pasado o el futuro, y solo una pequeña porción de nuestra atención está enfocada en lo que sucede en el momento actual. Especialmente si lo que estamos experimentando nos desagrada, intentamos que la experiencia del presente en nuestra mente desaparezca. Algo que ésta técnica posibilita, es aceptar la experiencia presente, que por otro lado es inevitable, sin sentir el sufrimiento que la misma nos puede provocar. En resumen, Mindfulness o Atención plena significa prestar atención de manera consciente a la experiencia del momento presente con interés, curiosidad y aceptación.

Una de las aplicaciones prácticas del Mindfulness es la reducción del estrés y los síntomas que ocasiona. Jon Kabat-Zinn, fundador de la clínica de reducción de estrés en Massachusetts, define el Mindulness como: “Prestar atención de manera intencional al momento presente, sin juzgar”. La práctica de Mindfulness nos permite tomar conciencia de nuestra realidad y trabajar de manera consciente con nuestro estrés, dolores, enfermedad, pérdida, o cualquier desafío de nuestra vida.
En cambio, si vivimos sin poner atención en el momento presente, y a menudo nos hallamos preocupados por lo que ocurrió o lo que va a ocurrir en el futuro, podemos caer en el descuido, el olvido y el aislamiento, actuando en nuestra vida diaria de forma automática y desadaptativa. La Atención Plena, por otro lado, nos permite recuperar el equilibrio interno, y atender a los diferentes aspectos de nuestro ser: cuerpo, mente y espíritu. Al practicar la Atención Plena, desarrollamos mayor capacidad de discernimiento y compasión. Situar nuestra mente en el presente, y estar conscientes del aquí y ahora, nos permitirá vivir una vida plena.
Mindfulness nos ayuda a hacer un espacio entre nosotros y nuestras reacciones, impidiendo una respuesta condicionada. La técnica de la meditación es un aspecto más formal de la Atención Plena, pero a continuación describo algunos pasos sencillos para poder iniciar con esta práctica. Este proceso se puede realizar a cualquier hora durante el día, y resulta útil para comenzar a adentrarse en el mundo del Mindfulness.

Apartarse por un tiempo. Para esto no es necesario ningún tipo de equipo especial, simplemente debes hacer un espacio para apartarte de todo por un tiempo cuya variación depende de tu necesidad de recobrar la calma.
Observar el Momento presente tal como es. El propósito de esta práctica es concentrarse en el momento presente, sin emitir juicio alguno acerca de nada. Si el flujo de pensamientos inútiles continúa en tu mente, deberás ignorarlos.
Deja que tus juicios pasen. Si algún juicio aparece en tu mente durante la práctica del Mindfulness, puedes tomar nota mental de ellos y dejarlos pasar.
Regresa a observar el momento presente tal como es. A veces nuestra mente se deja llevar por los pensamientos estériles.
Durante la práctica de la Atención Plena deberás hacer el esfuerzo de regresar una y otra vez al momento presente sin permitir que estos pensamientos hagan que pierdas la concentración.
Sé paciente con tu “vagabundeo mental”. No te juzgues por cualquier pensamiento que aparezca en tu mente, solo reconoce cuando tu mente se entretiene en estos pensamientos, y trae de nuevo tu pensamiento al presente.
